Autor: Benito Pérez Galdós
Género: Histórico/Aventuras/Clásico
Páginas: 193
Las intrigas cortesanas en que se ve envuelto Gabriel de Araceli trascienden del palacio a la calle y refuerzan el malestar popular y el odio al favorito Godoy, situación que culmina en el motín de Aranjuez, del que Gabriel es testigo, así como en los inmediatos sucesos que provocan la invasión de España por Napoleón y el ardoroso levantamiento de los españoles.
Muchos sabréis ya que hay un estupendo grupito, al que me agregué, de lectores maravillados con Galdós y sus Episodios Nacionales. La meta es leer todos los episodios, y así poco a poco se van organizando lecturas conjuntas de lo más interesantes.
He de reconocer que no me habría acercado a estas lecturas si no fuera por la ilusión que vi en el grupo, me dan un poco de pereza los clásicos, y eso que hay muchos que me han encantado. Estas lecturas están ayudando a que me quite esa sensación de que los clásicos van a aburrirme.
En este tercer episodio, El 4 de marzo y 2 de mayo, nos encontramos otra vez con nuestro querido Grabrielillo, tiene un trabajo más estable, ha madurado y todos los fines de semana va a visitar a Inés, una vida sencilla y feliz, ha olvidado por fin sus metas imposibles del anterior capítulo y como vemos se ha asentado. Pero claro, para Gabriel las cosas nunca son fáciles, cuando los tíos (los Requejos) de Inés hacen su aparición en escena y convencen a Celestino, el otro tío de Inés con el que vive, de que ella estará mejor con ellos al ser éstos muy ricos, aunque Inés y Gabriel recelan de esos extraños tíos, ella termina marchando con ellos. Mientras tanto una rebelión se fragua, Gabriel será testigo del Motín de Aranjuez durante el cual Godoy es apresado con violencia, por un pueblo muy enfadado por su gobierno pero también manipulado por la nobleza. Poco después Gabriel se pone a trabajar para los Requejos sin que estos le reconozcan, allí hará y deshará con tal de liberar a la desdichada Inés, pues sus ricos parientes la tratan como a una cenicienta y tienen pensado casarla con su tío Requejo, sabiendo que ella es en realidad heredera de una mujer de la nobleza. Gabriel planea una fuga, con tanta mala suerte que en el momento de realizarla, se produce el levantamiento del 2 de mayo, causado por la enorme inestabilidad política del país, se produce una cruenta batalla entre franceses y españoles, en la que Gabriel se ve metido de lleno.
He leído este episodio con mucho más interés que el anterior, Galdós lo narra de otra forma que me ha enganchado completamente. Sigue teniendo ese punto cómico en muchas escenas, pero también hay partes fuertemente dramáticas y sorprendentes. El tema a tratar no es fácil, por un lado tenemos un pueblo enfadado pero también manipulado, una masa que se convierte en algo cruel y salvaje, sin pensamiento independiente, capaz de las mayores salvajadas. A la vez unos gobernantes que hacen lo que les da la gana y tratan al pueblo como si fuera imbécil. La parte de las batallas contra franceses, son duras de leer, sobre todo la parte en la que la artillería francesa carga contra civiles españoles que luchan por su tierra y su libertad, pero sobre todo por él que está al lado luchando codo con codo.
Gabriel como personaje me ha deslumbrado, he agradecido mucho su desarrollo desde la anterior novela, gustándome también que en la anterior tuviera la cabeza llena de pájaros, tenía una inocencia que me llenaba de ternura, ahora es más maduro y reflexivo, más preocupado por los demás.
Es un libro que se disfruta desde la primera página, yo lo he devorado por que me podía el ansia de saber que sería de todos los personajes, pero también de esos españoles que luchan por su libertad. El final me ha dejado con muchísimas ganas de más, de saber que ocurrirá a continuación, entre los correos del grupo de lectura se habla de leer más episodios al año, lo cual me encantaría.
